Cuidando del rebaño

 

Va asomando el final del año. En su cincuenta y tres semana le daremos una patada en el culo a este nefasto dos mil veinte, esperando que el año venidero traiga alguna alegría bajo el brazo.

He elegido esta foto como resumen de lo que ha sido este año. Las mentes pensantes vigilando lo que hacemos mientras nos ordenan orden, confinamiento y paciencia. A estas alturas si digo que el tema es un poco pesado me quedo corto. Desde marzo encadenando encierros, restricciones, limitaciones, etc... El día que nos dejen salir de verdad, vamos a parecer pollos sin cabeza moviéndonos de un sitio para otro.

Quiero pensar que todo esto ha sido por nuestro bien y que durante el próximo año, conforme nos pinchen, volveremos a una vida parecida a la anterior. Por lo menos más social, donde poder disfrutar de nuestro entorno. Seguir fotografiando situaciones, lugares y momentos que este año han visto borrados del mapa y que poco a poco, volveré a buscar para conseguir una imagen de ellos.

Hoy es el día de los Santos Inocentes. Hasta no hace muchos años, en los periódicos, programas de televisión o noticias venía alguna inocentada. A tu alrededor tenías que tener cuidado porque algún amigo te daba alguna. Seguro que hoy pocas bromas vemos. Todo es excesivamente serio, hasta triste diría. Se está perdiendo el humor y eso es imperdonable, es una fuente de energía fantástica el tener una sonrisa siempre de oreja a oreja.

En la fotografía pasa tres cuartos de lo mismo. Hacemos millones de fotografías al día que terminan siendo banales. Todo muy milimetrado, muy técnico, con mensajes reivindicativos... pero ¿y la fotografía irónica, humorística, de escenas curiosas? estoy convencido que una fotografía de este tipo la guardamos en la memoria, independientemente de si es mejor o peor. Si nos saca una sonrisa seguro que la compartimos y disfrutamos de ella.

Este será mi propósito fotográfico para el próximo año. Buscar situaciones que saquen una sonrisa y suban el ánimo, que lo tenemos por los suelos. Nos hace falta humor a cantidades industriales para ser más felices, risas que nos ayuden a llevar el día a día de otra manera. Por intentarlo que no quede.

¿Y vuestro propósito?

Sobre esta foto decir que está hecha con una distancia focal de 55mm. de una lente zoom de 18-55mm. montada en una Canon 1100D con el equipo sin estabilizar en trípode. La luz que recibe la escena es la propia de la luz del día. 

La fotografía está hecha en modo manual con medición matricial, una apertura F5.6, velocidad de obturación de 1/125 con una ISO200 para completar el triángulo de exposición. Dicha exposición está sobre expuesta un paso según el exposímetro de la cámara. 

El revelado de la imagen está realizado íntegramente en Lightroom trabajando la corrección de lente, reencuadre, ajustes básicos, luminancia de colores, zonas con pincel de ajuste, filtro radial y degradado, más enfoque.